La Inteligencia Artificial (IA) no es cosa del futuro. Hoy en día, las empresas de impresión tienen el potencial de aprovechar los softwares y equipos existentes para llevar la IA a sus negocios.
En la actualidad, la IA de Xerox ofrece una gran oportunidad para emplear datos en línea, crear catálogos impresos o boletines informativos específicos, según las páginas que visualiza el usuario.
Se entiende por IA la capacidad de una máquina para imitar el comportamiento humano inteligente. Es cierto que esta definición es un término general para un amplio espectro de tecnología. De acuerdo con IDC, se estima que el valor del mercado de la IA en 2027 estará cerca de los $270 millones de dólares, creciendo cada año a un ritmo de 33.2%.
“La IA puede mejorar todos y cada uno de los aspectos del proceso de impresión, limitado solo por la cantidad de recursos (financieros, tecnológicos, empleados) disponibles para realizar este cambio. Al igual que con la introducción de cualquier nueva tecnología en una empresa, se necesita tiempo para evaluar realmente qué tiene más sentido para su empresa”, comenta Emmanuel Jardin, director ejecutivo de Artes Gráficas y Cuentas Estratégicas en México.
Para empezar, se puede implementar IA al automatizar tareas que anteriormente constituían cuellos de botella en el proceso de impresión, lo que aumenta la producción diaria de la empresa. Alternativamente, es posible delegar parte del trabajo más rutinario a una máquina para permitir que su equipo se concentre en un trabajo más estratégico.
Hay múltiples ejemplos de esto en la práctica, muchas imprentas han transformado su proceso de impresión al utilizar software con algoritmos inteligentes que pueden descifrar diferentes diseños de documentos, como optimizar flujos, para minimizar el desperdicio de impresión. Esto genera ahorros de costos y también beneficia al medio ambiente.
El punto de partida también podría ser tan simple como instalar un software inteligente que tenga la capacidad de monitorear qué prensas están ocupadas y luego enrutar nuevos trabajos a las prensas disponibles. Las prensas Xerox, como la iGen 5, emplean sensores para supervisarse constantemente y realizar ajustes en el proceso en tiempo real tanto en la alineación del papel y la calidad de la imagen y así proporcionar el mejor resultado de impresión posible sin intervención humana.
Desde una perspectiva de mantenimiento, las máquinas actuales también se pueden conectar con su proveedor, lo que permitirá que los datos de la máquina se analicen de forma segura, se comparen con el rendimiento esperado y luego se ajusten o actualicen de forma remota. En el futuro, estos datos podrían usarse para predecir la necesidad de servicio antes de que falle la máquina.
Con el auge del contenido digital, existe una gran oportunidad de aprovechar los datos en línea y con ello ofrecer servicios de impresión mucho más personalizados en el futuro, como la creación de álbumes de fotos personalizados, determinando las imágenes de redes sociales favoritas de un usuario o sintetizando catálogos impresos o boletines informativos específicos.