Por Ricardo Maldonado
Foto: Mario Torres
Como consecuencia de la crisis económica en que está inmerso el país, el sector industrial y mercantil de las Artes Gráficas, crece menos del 1% que es apenas un tercio de la capacidad instalada; que, se espera superar a través de las innovaciones de la moderna tecnología de las comunicaciones, explicó Bruno Galicia Landaverde, vicepresidente de la Cámara Nacional de Artes Gráficas.
En conversación con en EL IMPRESOR, Galicia Landaverde, señaló que el 97 por ciento de la industria de Artes Gráficas, incluyendo la editorial de libros, tiene el crecimiento mencionado a excepción del sector empaque que mantiene su estabilidad entre uno dos y tres por ciento, con variaciones a la industria colateral relacionada con la actividad de las Artes Gráficas.
Galicia agregó que se trata de un grupo numeroso que está por encima de las 21 mil quinientas empresas de muy variado poder económico que con los negocios y actividades de Artes y Oficios superan los 24 mil actores. Las ramas interrelacionadas –creación y actividades artísticas individuales- son preocupaciones de la Cámara para convertirlo en empresas que contribuyan al Producto Interno Bruto (PIB).
Durante la conversación, nuestro interlocutor comentó, que los empresarios de la Artes Gráficas no deberían tener temor, ni espantarse, por la existencia de los avances tecnológicos que, por ahora, deben ser considerados una herramienta más y un interesante medio para elevar la producción, la productividad y la calidad de las Artes Gráficas.
Al referirse al sector de empaque, que sólo se ve afectado en uno dos o tres por ciento, hizo la ampliación para señalar que el resto de la actividad industrial y comercial, sin que se tengan datos exactos significa una aportación al crecimiento industrial del país por miles de millones de pesos. Galicia estima que la mayoría, un 97 por ciento de las industrias que conforman el sector de la Artes Gráficas reciente un descenso en la producción porque las empresas colaterales son muy pequeñas y, en otros casos son negocios familiares y hasta personales, como sucede con los talleres de impresión que lamentablemente también se están viendo afectados por la paralización económica, puesto que no crecen más allá del uno por ciento, que en la Cámara se considera como un crecimiento marginal.
“Por lo bajo de la adquisición de nuestros clientes, estamos fuera de nuestra capacidad instalada y este es uno de nuestros principales retos; superar el tropiezo y viabilizar el desarrollo de los miles de negocios que integran las Artes Gráficas. Tenemos el reto, de actualizar la maquinaria que, antiguamente se renovaba hasta después de 70 años, ahora, la renovación debe hacerse cada tres años, pues estamos viviendo los tiempos de la automatización y los avances de la tecnología.
En aquel tiempo que corresponde a los últimos años de la segunda mitad del siglo veinte, había negocios a los que les iba muy bien, por ejemplo en el ramo de los impresores; imprimiendo tarjetas para bodas, quince años, tarjetas de navidad, por supuesto tarjetas personales y gran cantidad de publicidad impresa para uso de los más variados negocios de la actividad mercantil. Aquellos fueron años maravillosos, expresa nuestro entrevistado.
Ante esta situación, Galicia dice que la transformación acelerada de la maquinaria y los medios en esta industria significan otro empeño que debemos realizar; actualizar aquellas empresas se han convertido en otras formas de producción que tienen una caducidad mucho más acelerada que en los años ochenta o noventa del siglo pasado.
Galicia Landaverde que tiene un amplio conocimiento sobre las Artes Gráficas señala que, otra de las preocupaciones de la representación camaral es la de mantener buenas relaciones con los colectivos de otras actividades e informa que la CANAGRAF mantiene magníficas relaciones con la CANACINTRA y constante comunicación con organismos internacionales y nos refirió que recientemente estuvo en la inauguración de la sede de la Printing industries of América (PIA).
Respecto a las nuevas tecnologías recientemente puestas en el mercado, nuestro interlocutor señala que los industriales y comerciantes de las Artes Gráficas, deben implicarse en el uso de todos los avances científicos y tecnológicos.
En cuanto a lo que se refiere a las relaciones de la Cámara con el gobierno, Galicia expresa que son magníficas y que además incluyen al poder Legislativo, del cual no esperan una nueva ley sobre las Cámaras Industriales porque la membresía de CANAGRAF que antes debía registrarse en su respectiva Cámara, ahora lo hace voluntariamente en razón a un nuevo concepto sobre la fuera de colectividad en cualquier sector.
En un momento, la conversación cambió hacia la situación de los avances tecnológicos y los libros; y Galicia, manifestó que él prefiere leer papeles que pantallas porque la tecnología no ha logrado, que la pantalla tenga semejanza con el papel e hizo hincapié en que es necesario enfrentar la propaganda en contra de la impresión.
Finalmente inquirimos sobre la Fundación de la CANAGRAF que fue creada por Agustín Laborie que fue su primer presidente en 1964. “Estamos cumpliendo 52 años” y nuestro actual presidente es Don Manuel Ramos Becerra. “Puedo decirle que CANAGRAF ha tenido tiempos de esplendor y momentos difíciles. Estamos preparados para enfrentar los nuevos retos de la tecnología y de la ciencia y consideramos que las dificultades económicas del momento, van a ser superadas con el esfuerzo colectivo, porque los más pueden más que los menos y nuestra membresía está perfectamente unida” concluyó.