En la impresión textil digital, la tinta y su costo es un factor clave para muchos clientes. Dado que este consumible representa una parte importante de los costos variables de la producción en la impresión textil, también tiene un impacto relevante en los modelos de negocios.

Los precios de las tintas han caído drásticamente en los últimos años pero han alcanzado niveles mínimos. Sin comprometer su nivel de calidad (intensidad del color, por ejemplo) los expertos esperan una estabilización de sus precios.

Para optimizar los costos en la producción, las empresas digitales textiles hacen todo lo posible para mantener bajos los precios, pero no hacen suficiente énfasis en otros factores críticos como los perfiles, flujos de trabajo y las gestiones no optimizadas que afectan negativamente la rentabilidad.

En muchos casos, si estos factores se aplican correctamente, llegan a reducir el consumo de tinta en un aproximadamente 10% sin comprometer la calidad en la imagen o las propiedades del producto.

Profundizando un poco en el tema, el uso de perfiles adecuados es muy importante en la impresión textil digital. Para crearlos se necesita un conocimiento amplio de los materiales que usarán, su tratamiento previo, las necesidades del cliente final, las características de la máquina que se usará y los procesos textiles usados.

Al crear un perfil hay una variedad de parámetros que deben considerarse para ajustar la calidad de la impresión y el consumo de tinta. Se debe prestar atención al uso exacto de los colores claros y se debe tener cuidado con el ajuste adecuado del límite de la tinta y su configuración para su pre tratamiento.

En la impresión textil, existen diferentes tejidos, métodos de pre tratamiento o ajustes de temperaturas en los secadores que impactan fuertemente en los procesos. Por lo tanto, lo ideal es crear un perfil por separado para cada entorno de producción; que no llevará mucho tiempo hacerlo, y de esta manera, si el cliente necesita cuatro perfiles diferentes es necesario tener a la mano mínimo dos soluciones técnicas: una diseñada para el máximo ahorro de tinta y la otra para el máximo espacio en el color.

Al tomar en cuenta estos aspectos, el equipo experto en aplicaciones textiles de Durst ofrece su asesoramiento. Thomas Mauser, especialista en aplicaciones en impresión textil de Durst, viajó a Asia para ayudar a un cliente a optimizar su proceso de impresión. Mauser lo ayudó a varios ajustes como la acumulación de la tinta negra para lograr hasta un 60% de tinta en algodón de 160 gramos.

Esto demuestra claramente cómo se puede aprovechar el potencial de la impresión textil digital mediante el uso de perfiles automatizados, flujos de trabajo y gestiones de color, lo que da como resultado negocios altamente rentables que utiliza, por ejemplo, la tinta Durst Reactive HDI. El valor general y la rentabilidad no serán posibles simplemente centrándose en el precio de la tinta en sí. El enfoque de Durst marca la diferencia.