Por Ricardo Maldonado
Fotografías de Mario Torres
En el museo El Estanquillo, ubicado en el corazón del Centro Histórico Isabel La Católica 26 de la Ciudad de México, con la curandería del caricaturista Rafael Barajas, El Fisgón, se exhiben 125 piezas del artista plástico Vicente Rojo, que comprenden un periodo que va de los años sesenta del siglo pasado al 2010 del presente.
Exposición que contiene el concurso del también pintor, escultor, editor y diseñador Vicente Rojo, desde el primer libro editado por el cronista Carlos Monsiváis (1938-2010) titulado: Principados y potestades, de 1969, al último libro de Monsiváis, Lírica sacra, moral y laudatoria, que reúne 48 de sus aforismos y 24 grabados del diseñador.
Exhibición que nos explica Ana Cristina Valenzuela, encargada en el museo de la investigación y gestión de exposiciones, se compone con retratos, publicaciones, dibujos, textiles y serigrafía sobre papel seleccionados por El Fisgón y el hijo del pintor Vicente Rojo Cama, sobre la obra del más destacado diseñador de las Artes Gráficas” de los últimos tiempos.
Nuestra amable interlocutora en el museo, nos refiere que Monsiváis consideraba a Rojo, “como el padre del diseñador en México” y, agrega que esta actividad –el diseño- es un arte indiscutible, aunque algunas personas lo consideren un medio comercial. En todo caso, nos explica, que el maestro Rojo mezcló ambas funciones, y Aforismo y grafismos, Vicente Rojo y Carlos Monsiváis, es el título de la exposición.
De los primeros copiamos dos: “Qué hago si por una puerta entra un ángel y por la otra un demonio. Le pido un autógrafo al demonio (es una celebridad) y me retrato con el ángel (es más fotogénico)”. El otro: “Sin ser ni el primero ni el único Rojo si lleva su Olimpo histórico hasta entonces reacio a considerar libros y revistas como susceptibles de tratamiento estético. Las exigencias formales que son requisitos del avance”: Monsiváis.
Ana Cristina señaló que en cuanto al diseño, Rojo lo hace en portadas de libros y revistas, principalmente en suplementos de diarios como en Novedades, donde se creó el suplemento, México en la Cultura, que más tarde Fernando Benítez, lo llevaría a la revista Siempre!, para editarlo como, La cultura en México. En esta actividad, el artista y el cronista se hicieron amigos, y ahí surgieron los objetivos y la personalidad de cada uno de ellos: Rojo transformó a Monsiváis en distintos personajes, “eran bromas que pensé, explicó el día de la inauguración de la exposición, que estaban perdidas, desde donde yo estuviera se las enviaba a Carlos, pero él las conservó.
Hoy, esos dibujos y caricaturas, entre las cuales no faltaban los gatos: diseño de Monsiváis con cara de gato (el cronista amaba a los felinos) es decir la metamorfosis de Monsiváis a gato: filamórfico. Además, hay un libro con fotografías de Rojo, titulado: Puntos suspensivos, que los visitantes pueden revisar con fotografías de sus obras.
La muestra se puede considerar como un recuento de la entrañable y leal amistad entre ambos personajes: “entrañable y divertida relación amistosa y profesional entre Vicente Rojo y Carlos Monsiváis a lo largo de cuarenta años”, según la información boletinada por las bromas del primero al segundo, que incluían transformarlo en Dios prehispánico, además de las transformaciones en felino, que ocupan una sección en la muestra y que, nunca antes se habían expuesto al público.
En atención al sentido humanista de los dos creadores y a su participación en causas sociales, la muestra exhibe un buen número de muñecas que elaboraron los integrantes de la Cooperativa 19 de septiembre, organización integrada por artistas y costureras de San Antonio Abad damnificadas a raíz del temblor de 1985. Las muñecas fueron diseñadas, precisamente por el maestro Rojo.
En apoyo a esta exposición el área de servicios educativos del museo El Estanquillo, ha organizado talleres gratuitos para todas las edades y visitas guiadas, y ha estado a disposición del público visitante una aplicación para Ipad que puede descargarse de manera gratuita para que los visitantes puedan obtener mejor información de esta muestra que permanecerá hasta el 13 de abril próximo.
Al mismo tiempo que se inauguró esta exposición, con la presencia de Carmen Tostado, coordinadora de Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural de la Secretaría de Cultura del Distrito Federal y de Gerardo Jaramillo, director general de Librerías EDUCAL, se inauguró una nueva librería en la terraza del edificio del museo El Estanquillo en la cual se ofrecen títulos tanto de Monsiváis como de autores de temas afines, así como recuerdos del museo y de sus diversas exposiciones.
Estas obras y su exposición al público están vigentes en la peor época de crisis; lo cual, eleva su importancia y validez para conservar el recurso del diseño, del grabado, la pintura y, en el terreno de los libros, las condiciones para que el pueblo lea y tenga un medio de expresión en la museografía y la cultura de librerías y bibliotecas en el país.