Para mejorar la impresión en 3D, simplemente añade gel. Esta es una técnica nueva que se utiliza para soportar formas complejas que se desmoronarían bajo su propio peso en la impresión 3D normal.
Esta recién descubierta combinación de fuerza y delicadeza será crucial si queremos algún día imprimir las estructuras biológicas que componen los órganos, vasos sanguíneos y otros tejidos.
El gel, que tiene la consistencia de un desinfectante de manos, está hecha de un polímero de ácido acrílico. Funciona como un andamio, lo que permite la impresión de patrones intrincados que colapsarían sin su apoyo.
Esta complejidad es importante. Los investigadores siempre han querido imprimir en 3D órganos humanos completos, pero éstos necesitan sistemas de vasos sanguíneos finos divididos para suministrar oxígeno y nutrientes. Esta nueva técnica permite la impresión en las dimensiones correctas para hacer esto, creando esferas de sonido estructuralmente tan delgadas como dos hojas de papel y hebras 10 veces más delgadas mediante la incorporación del gel en los objetos.
Una dificultad en el uso de la impresión 3D tradicional para crear el tipo de estructura que se encuentra en nuestros órganos, es que se colapsan mucho antes de ser terminados. La impresión con gel de apoyo resuelve este desafío, previene a las creaciones de tener flacidez o que se pandeen antes de que se solidifiquen.
Thomas Angelini es quien encabeza esta investigación en la Universidad de Florida en Gainesville y su equipo ya ha utilizado la técnica para imprimir material fuera de las células vivas – incluyendo células de riñón canino y vasos sanguíneos humanos. Los investigadores también pueden usar silicón, hidrogel y otros polímeros, e hizo una réplica del cerebro de un colega con la consistencia suave del hidrogel para probarlo. Los órganos internos son tan individuales como las caras, por lo que basaron el cerebro en imágenes detalladas de la materia gris del profesor.
“Podríamos prever un futuro en el que, antes de la cirugía cerebral, el cirujano podría imprimir el cerebro de hidrogel en 3D y practicar en él”, dice Angelini. “Entonces, el cirujano sabe exactamente cómo llevará a cabo la cirugía.”
“Ellos han hecho, creo, un avance significativo”, dice Jennifer Lewis, de la Universidad de Harvard. “Es una hermosa pieza de trabajo.” Una de las limitaciones, dice, es que hasta ahora el gel no es orgánico, por lo que no podría mantener vivo el tejido impreso en 3D.
El gel tampoco puede ser utilizado para estructuras impresas por debajo de un cierto tamaño ya que las partículas muy pequeñas se pueden deslizar fuera de él, como un pez a través de una red.
El uso de la impresión 3D para hacer tejido y órganos todavía tiene un largo camino por recorrer, pero Angelini es optimista. “Creo que nuestro método representa un buen comienzo hacia eso”, dice. “Realmente creo que vamos a llegar allí.”
En este video se puede ver cómo se imprime con este gel:
Fuente: newscientist.com