Por Isaac “Ike” Savitt

Nueva York.- La negociación sobre la revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, NAFTA por sus siglas en ingles, que arrancará previsiblemente entre el 16 y el 18 de agosto, los tres socios, Canadá, Estados Unidos y México, están de acuerdo que el libre cambio debe ajustarse a la nueva realidad económica.

En este marco, Kenneth Smith Ramos, director de la oficina del NAFTA en la Secretaría de Economía de México y la embajada de México en Estados Unidos, presentó en la Cámara de Comercio de la ciudad de Nueva York, un estudio de todos los ángulos en que el comercio mexicano está involucrado en este acuerdo.

Las inversiones de las empresas mexicanas en Estados Unidos por más de 52 mil millones de dólares en los sectores de servicios, como FAMSA, Cinepolis, América Móvil, y otras trece. En alimentos, Bimbo, La Costeña. Minsa, y otra once. Manufactura, como Cemex, IUSA, Vitro y doce más. Servicios Financieros, como Banorte, Monex, Grupo Salinas, y cuatro más. Automovilística con Nemak, Metalsa, Verzatec, y otras seis.

Son una muestra de cómo contribuye MÉXICO en la economía local de muchas comunidades de la Unión Americana.

Los retos de la modernización del NAFTA que serán negociados serán: ampliar los beneficios del NAFTA   a todos los sectores de las tres naciones. Racionalizar la integración regional. Fortalecer el valor de las cadenas regionales. Manejo eficiente en las fronteras. Desarrollar nuevos elementos de competitividad.

En resumen, las negociaciones del nuevo tratado entre las tres naciones se basan en tres elementos básicos:

• Mantener una evaluación continua de los beneficios que cada país logre;
• Reconocer que este acuerdo es para la modernización, y
• La proposición de ganar-ganar-ganar; vendrá con el proceso que generará más beneficios para todos.

Durante la conferencia, quedó muy claro que el libre comercio seguirá aportando beneficios a todos los sectores de los pueblos que lo practiquen. Seguiremos informando.

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